Diario de géminis

No es que realmente crea en los signos. De hecho, soy, sobre todo, escéptica frente a la mayoría de las cosas: Dios, seres sobrenaturales, aliens que nos invaden, sexto sentido, fuerzas curativas de cualquier tipo. Pero, aún así, debo decir que dio la casualidad, enorme casualidad de que justo yo fuera a nacer bajo el signo de los gemelos y que mi personalidad coincidiera en mucho. Llamadle capricho de los hados, oh compañeros, o dígnale simplemente que si hay alguna fuerza superior vino justo a mí para retrucarme mi incredulidad.

Recién (que no es su recién, lector, sino el mío actual y no futuro, o sea cuando ya no esté escribiendo estas líneas) estaba copiando una partitura (me quedé sin tinta...). Una partitura simple, sencilla, de un "resumen" de Canon de Pachelbel. Simplemente es la melodía que tengo que estudiar para la escuela... y no podía soportar la simplicidad, la poco armoniosa partitura (ni acordes) que nos dieron. Hace poco, en el verano, hará unos tres meses, empecé a estudiar piano. Y no me iba a quedar aburrida contando tiempos con las blancas, así que fui a Music Scores y bajé una versión. Jeje.

Volviendo al punto, estaba copiando una partitura cuando de repente me di cuenta de cuántas cosas hacía. Tenis (un mes), inglés (estoy en 5to), piano, japonés (un año de antigüedad)... y creo que no me estoy olvidando de nada. Ah, sí, también, para ir con los tiempos, me psicoanalizo (un año). Don't ask. Además, desarrollo la actividad denominada "otakismo" (bah, no, ese nombre se lo inventé yo). Soy otaku, señoras y señores. Soy una fanática del animé (felicito a quienes se hayan dado cuenta de /por qué/ empecé tenis) y del manga. Eso insume tiempo, mucho tiempo (y dinero, pero ese no es el tema en este momento). No es solo mirar animé: convenciones, salidas en búsqueda del tomo agotado de algún manga, dibujo, preguntarse cómo puede ser que haya llenado los 140 GB de las dos pc, liberar los susodichos, encontrar imágenes, charlas, pines, soportar a los que nos discriminan, alejarse de algunos otakus-darkies (más que el resto), estudiar japonés, escritura de fics, invención de excusas para tus profesores cuando te hallan escribiendo dichos fics en medio de la clase en vez de tomar apuntes, desarrollo de imaginación para zafar cuando descubren que es un yaoi, artilugios para no morir cuando se dan cuenta de que estabas escribiendo la parte de lemon (aún no escribí ningún yaoi, pero si algún día quiero que la esctricta y estructurada profesora de geografía muera recordaré "accidentalmente" deslizar alguna hoja de un doujin yaoi entre las carátulas, wyajaja)..., etc.

No solo hago actualmente muchas actividades, también he hecho en el pasado otras cuantas (gimnasia artística, patín sobre hielo, patín sobre ruedas, danza jazz, teatro, natación, construcción de juguetes, equitación y que no recuerde más no significa mucho). Digamos que me gusta probar cosas nuevas, tal vez demasiado.
Soy Miyod. Soy otaku. Tengo trece años. Y este, damas y caballeros, es mi diario.